Niño

Tú puedes pretender creer que él es feliz
Aunque sabes el abismo que hay entre tu piel y la de él.
Solo asientes y miras al otro lado
Mientras él pone más cadenas en su candado.
Ya sabemos que él no, ¿pero tú?
¿Eres feliz?
Tú puedes pretender creer que él es feliz.
¿No necesitas que él tome tu mano?
¿No te importa que él no te diga que te ama?
¿Eres, acaso, tan inocente para no descubrir que le hablas a una pared?
Ya sabemos que él no, ¿pero tú?
¿Eres feliz?

El único descuido tuyo, error o bendición es saber amar.
Y por eso, Ángel, no te debes preocupar.
Solo la bendición y el sacrificio del amor.
Llegará algún día a darte tan merecido calor.

Acaso el amor se muestra con palabras y acciones, él suele preguntar.
Estancado, entre el deseo y la razón, él no se logra levantar.
Sino que se deja manipular por la más mínima y fanática molécula.
Molécula que necesita de temores para crecer.
Tal vez quien no entre en la gran tienda sea él, por no creer en el amor
Por no demostrar ni una sola vez el aprecio y cariño merecido por ti.

Niño, si es que estás perdido entre las luminarias del mundo
Has de saber que hay alguien que te espera.
Niño, escondido entre heridas, no puedes amar, no puedes sentir.
Ni confesar amor.
Niño, ya has crecido, pero el amor por apariencias no es medido.
Lo que sientes en tu corazón es lo que eres.
Y por más piedras, palabras y excusas.
Por más versos, oraciones y cantos que eches
Para tal vez enterrar tus verdaderos deseos,
No logrará jamás en ti el alba despuntar.
Si no que seguirás con el plan de a ti mismo engañar.

Maldito sitio de insurrección,
Dónde el sentir ya no es natural al ser,
Gracias a ti, hoy no puedes ser, ni puede él ser feliz.
Tantas veces derrochaste tu corazón
Y solo recibiste de vuelta una negación.

Ahora en soledad estás y está él también.
El creyendo que se hace bien alejándose sin mirar.
Tu creyendo que vendrá pronto a pernoctar.
El creyendo que se hace bien, oh, ¿qué es el bien?

14 sep. 08 10.46pm
Marcus RCM